Esperanza.
Viajando por Océanos de Eternidad
llegan de madrugada,
pequeñas luciérnagas
que se refugian lentamente
en la penumbra y bailan encendidas
llenas de silencio.
Bailo con ellas, diminutas
hadas de seda verde ,
acunando en mis manos
sus suaves miradas .
Son las luces del Alma,
que sonríen al destino,
iluminando el aguerrido
y valiente camino emprendido
por la defensa de La Libertad,
La Justicia y La Dignidad.
6 Comments:
Bellas palabras.
Esperemos que de verdad nos acompañen en nuestro empresa de desalojar de La Moncloaca a Rodríguez el Traidor.
Muchas gracias Cerrajero.
Y bienvenido al blog, está recién creado ,poco a poco lo iré mejorando.
Si a la belleza de tu carisma noble añadimos el arte con el que te
expresas , sensibles capacidades se suman inagotables a las muchas
virtudes
de tus logros personales .Porque así es la valía de tu virtuosismo en
la
perspectiva creadora que protagonizas ;polifacética para dar lo mejor de ti en luminosas y personales obras pictóricas como generosa en expandir
hermosura que te nace del alma y se desparrama en cascada de luz y
alumbra
Justicia donde se necesita.
Preciosismo en la inspiración de tus palabras como sólo Tú sabes
expresarlas y en el detalle de la creatividad tu inteligencia se
expande.
Desde hoy más anhelo en seguir tu creación que no sólo contemplo
sino
que ya imaginaba pronta por cuanto sé que aportas a este tiempo que vivimos...ahora sé donde hallarte y
continuar con el deleite de tus pensamientos que destilan la
personalidad
de tus valores.
Echaba de menos un lugar donde encontrarte.Gracias porque estoy de
enhorabuena con tu nuevo blog.
Te sigo .
elenco
Bienvenido querido amigo elenco, tus palabras son una fuente de inspiración.Gracias por estar ahí, intentaré llevar el blog lo mejor posible:)
No podías empezar mejor, preciosas palabras.
Un abrazo
Es muy tortuoso el camino
que, querida, has emprendido.
Síguelo con buen sentido
y ojalá que tengas tino.
Mas el Hades te acompañe
y ningún lobo te engañe:
pues otros que lo siguieron
hace mucho que cayeron
-no fueron, quizá, veraces-.
Tú, sus pasos nunca traces:
fuegos fatuos sólo son
que llevan a rendición.
Un saludo
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